- Larga historia de los juegos de azar
- Impuestos altos
- No se permiten todas las modalidades de juego
- Requisitos legales estrictos
- Legislación oficial en el año 2010
Durante mucho tiempo, el gobierno francés no permitió los juegos de azar, a pesar de que es una actividad con una historia que se remonta al siglo XVI. Curiosamente, la ruleta y algunos otros componentes de los juegos de azar se inventaron en Francia. La ruleta la inventó un famoso filósofo llamado B. Pascal.
Así pues, después de estar prohibidos durante bastante tiempo, en 1987 se dio el primer paso hacia unas condiciones más favorables en relación a los juegos de azar: la edad mínima para poder jugar pasó de 21 a 18 años.
Un año después, se dio el siguiente paso: se legalizaron las tragaperras. Sin embargo, los cambios importantes se iniciaron en el 2005, cuando la Comisión de la UE analizó con lupa el mercado de los juegos de azar francés. Después de este escrutinio, las autoridades francesas implementaron cambios en la ley y abrieron más el mercado a los países de la UE.
Sin embargo, las condiciones eran desfavorables para los empresarios del juego debido a los altos impuestos y a los estrictos requisitos legales.
Condiciones para administrar negocios de juegos de azar
Hay que decir que no hay una única entidad para supervisar el sector del juego en Francia. Hay tres instituciones principales que controlan distintas actividades: Pari Mutuel Urbain es responsable de las apuestas; las loterías están controladas por Française des Jeux; y la autoridad reguladora de los juegos de azar en línea se ocupa de supervisar las actividades a distancia. Por cierto, esta última entidad legalizó totalmente los juegos de azar interactivos en el 2010.
Desde entonces, hay 3 tipos de actividades de juegos de azar. Para los aficionados al deporte, las apuestas deportivas en línea o las apuestas hípicas son una opción. A su vez, el póquer en línea es una opción más adecuada para los amantes de los juegos de habilidad.
Los licenciatarios deben pagar muchos impuestos. Para empezar, a los botes de póquer en efectivo se les aplica un impuesto del 2 %. Las apuestas deportivas se gravan con un 7,5 % y un 1,8 % adicional. En las apuestas hípicas se paga un 7,5 %, al que hay que sumar un 8 %. Finalmente, los operadores de casinos tienen que pagar un impuesto corporativo del 33 %.
En resumen, actualmente, los juegos de azar están permitidos en Francia, pero hay que analizar las condiciones antes de jugar o de abrir una empresa allí.